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Happy New Year 2025!/¡Feliz Año 2025!


Happy New Year 2025!  The Solemnity of the Epiphany we celebrate today is a great introduction to the Jubilee Year of Hope!  The magi followed the star; their hope to encounter the newborn King - God-with-us.  Isn’t He our hope, as well?


Pope Francis inaugurated a Jubilee Year for the entire church - a Jubilee of Hope.  From a wheelchair, he invited us to be Pilgrims of Hope.  Imagine.  From a wheelchair.  But, he has hope. Let that be your word of the year:  HOPE! Bishop Golka has written his first Pastoral Letter on this theme:  Christ Our Hope.  I encourage you to read it and share it.  Here at Saint Francis, we are very honored and happy to be named by Bishop Golka as a pilgrimage site for this Jubilee Year of Hope!  We will be marking the 800th Anniversary of Saint Francis’ beautiful Canticle of Creation.  A poem, a hymn, that expresses his hope that all creatures, all creation, will be caught up in God.  


Prayers for the Jubilee Years are for:  remission of sin, conversion, forgiveness, and a renewed outpouring of God’s grace.  Jubilee years go back to the Old Testament. An ordinary Jubilee is now celebrated every 25 years, so this doesn’t happen very often!  Hope, Christian Hope, is needed now more than ever!


In his Letter announcing the Jubilee Year of Hope, Pope Francis wrote, “For everyone, may the Jubilee be a moment of genuine, personal encounter with the Lord Jesus, the "door" of our salvation (Jn 10:7,9) whom the church is charged to proclaim always, everywhere, and to all as "our hope" (1 Tim 1:1).  


Here is The Jubilee Prayer, Pilgrims of Hope:


Father in heaven,

may the faith you have given us in your son, Jesus Christ, our brother, 

and the flame of charity enkindled in our hearts by the Holy Spirit, 

reawaken in us the blessed hope for the coming of your Kingdom.


May your grace transform us into tireless cultivators of the seeds of the Gospel.

May those seeds transform from within, both humanity and the whole cosmos, 

in the sure expectation of a new heaven and a new earth, 

when, with the powers of Evil vanquished, your glory will shine eternally.


May the grace of the Jubilee reawaken in us, Pilgrims of Hope, 

a yearning for the treasures of heaven.

May that same grace 

spread the joy and peace of our Redeemer throughout the earth.

To you our God, eternally blessed, be glory and praise for ever.  

Amen.


——


¡Feliz Año 2025!  La solemnidad de la Epifanía que celebramos hoy es una gran introducción al Año Jubilar de la Esperanza.  Los magos siguieron la estrella; su esperanza de encontrar al Rey recién nacido - Dios-con-nosotros.  ¿No es Él también nuestra esperanza?


El Papa Francisco inauguró un Año Jubilar para toda la Iglesia: un Jubileo de la Esperanza.  Desde una silla de ruedas, nos invita a ser Peregrinos de la Esperanza.  Imagínense.  Desde una silla de ruedas.  Pero, tiene esperanza.  Que esa sea tu palabra del año:  ¡ESPERANZA!  El Obispo Golka ha escrito su primera Carta Pastoral sobre este tema:  Cristo, Nuestra Esperanza. Les animo a leerla y a compartirla.  En nuestra parroquia aquí, San Francisco, nos sentimos muy honrados y felices de haber sido nombrados por el Obispo Golka como lugar de peregrinación para este Año Jubilar de la Esperanza.  Celebraremos el 800 aniversario del hermoso Cántico de la Creación de San Francisco de Asís.  Un poema, un himno, que expresa su esperanza de que todas las criaturas, toda la creación, glorifiquen a Dios.  


Las oraciones para los Años Jubilares son para: la remisión de los pecados, la conversión, el perdón, y una efusión renovada de la gracia de Dios.  Los años jubilares se remontan al Antiguo Testamento en la Biblia. Ahora se celebra un Jubileo ordinario cada 25 años, por lo que esto no sucede muy a menudo.  La esperanza, la esperanza cristiana, es más necesaria que nunca.


En su Carta anunciando el Año Jubilar de la Esperanza, el Papa Francisco escribió: "Que el Jubileo sea para todos un momento de encuentro auténtico y personal con el Señor Jesús, la "puerta" de nuestra salvación (Jn 10:7,9), a quien la Iglesia está encargada de anunciar siempre, en todas partes y a todos como "nuestra esperanza" (1 Tim 1:1).  


Aquí está la Oración del Jubileo, Peregrinos de Esperanza:


Padre que estás en los cielos

la fe que nos has donado en tu hijo, Jesucristo, nuestro hermano, 

y la llama de la caridad infundida en nuestros corazones por el Espíritu Santo, 

despierten en nosotros la bienaventurada esperanza en la venida de tu Reino.


Tu gracia nos transforme en dedicados cultivadores de las semillas del Evangelio que fermenten la humanidad y el cosmos, 

en espera confiada de los cielos nuevos y de la tierra nueva, 

cuando vencidas las fuerzas del Mal, se manifestará para siempre tu gloria.


La gracia del Jubileo reavive en nosotros, Peregrinos de Esperanza, 

el anhelo de los bienes celestiales y derrame en el mundo entero

la alegría y la paz de nuestro Redentor.

A ti, Dios bendito eternamente, sea la alabanza y la gloria por los siglos.

Amén.

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